Soy Hernan, pero todo el mundo me conoce como Nan. Me encontraréis en el taller con las manos sucias reparando todo tipo de bicis, asesorando y resolviendo en todo lo que pueda, vuestras dudas.
He competido a nivel amateur en varias disciplinas como DH, Enduro, Rally, Marathon,… pero me gustan todo tipo de bicis, rutas y aventuras sobre ellas, solo o acompañado. La bici me ha dado casi todos los amigos que tengo y muchos de mis mejores recuerdos.
Soy Mariona, la parte de los números y el marketing de Cyclosphera. En nuestra tienda/taller me veréis concentrada en el ordenador haciendo pedidos, entrando facturas, respondiendo correos y llevando toda la parte que no se ve en un negocio. Pero también me encontraréis en la tienda, atendiendo y recepcionando vuestras entradas a taller.
Estoy en formación constante para aprenderlo todo y daros un buen servicio tanto en tienda como en taller ayudando a Nan.
Los dos formamos un tándem todo terreno. Nos conocemos desde hace más de 20 años y en nuestro tiempo libre nos encanta viajar y conocer sitios nuevos aunque estén a la vuelta de la esquina. Disfrutamos envueltos de naturaleza y no hay mejor forma que hacerlo en bici.
La idea de Cyclosphera surgió en 2017 y a finales de 2019 se hizo realidad. Aunque sufrimos la pandemia a los 4 meses de abrir y con ello, el cierre de la tienda durante un tiempo, estamos muy felices con lo que estamos construyendo y la aceptación por parte de nuestros clientes.
Lo bueno de trabajar los dos juntos es que todas las decisiones e ideas que tenemos, las trabajamos y desarrollamos conjuntamente hasta que nos convence a los dos. Nuestra visión hacia el negocio y la vida es muy parecida, y eso se refleja en Cyclosphera.
Cyclosphera es nuestro sueño, un reto conseguido, nuestra puerta al mundo. Somos marido y mujer, lo compartimos todo y nos encanta lo que hacemos.
En nuestros viajes en furgoneta, siempre llevamos una libreta para anotar todas las ideas que nos vienen a la cabeza. Camino a uno de nuestros viajes a Cantabria, perfilamos todo lo que queríamos que fuera Cyclosphera. ¡Y aquí estamos!